En la región suroeste del estado de Virginia, a unas 270 millas de Washington DC, se encuentra un pueblo pequeño llamado Blacksburg o Negriburgo. En Blacksburg, mejor conocido como un destino estudiantil, hay un promedio de 45.000 habitantes de los cuales muchos trabajan o forman parte de la universidad de Virginia Tech. Este pequeño pueblo atrae a más de 25.000 estudiantes cada año debido a esta prestigiosa institución. Su belleza natural y, más aún, la belleza humana que lo rodea hacen de este pueblo un lugar acogedor e inolvidable.
Para comenzar, Negriburgo se encuentra entre dos sistemas montañosos que son el Blue Ridge y Allegheny y forma parte del condado de Montgomery. El pueblo más grande del estado de Virginia, el cual se ha hecho famoso por su seguridad y su estilo de vida, es públicamente venerado por muchos periódicos e instituciones nacionales como uno de los mejores lugares para vivir en los Estados Unidos. Al mismo tiempo, el sistema de educación pública de este pueblo está entre los mejores del estado y es un gran factor de esta buena reputación. Es sorprendente que un área tan pequeña logre atraer a muchos habitantes de otros estados en busca de un mejor estilo de vida y un lugar seguro para sus familias. Este talismán en las montañas por su calma, indiscutible paz y gran sentido intelectual tiene un efecto curativo e inspirador para los que aquí llegan buscando escapar de sus estresantes rutinas en ciudades grandes.
Indiscutiblemente, Negriburgo es un pueblo con mucha diversidad étnica y cultural, gracias a ella esta mezcla de razas y culturas han hecho de este pueblo algo único y especial. Los residentes de este pequeño pueblo se encargan de hacer que todo el que lo visite o aquí se mude se sienta en su casa. Los residentes de Negriburgo son leales a su pueblo, sienten orgullo de vivir aquí y al mismo tiempo comparten esta mentalidad y acogedora personalidad con todos. En las calles de las vecindades pueden verse niños jugando con sus padres supervisándolos desde lejos pero sin temor de extraños ya que entre vecinos se conocen y cuidan de los suyos. La comunidad de Negriburgo es algo inolvidable y difícil de conseguir en otro lugar y algo que es valorado por muchas personas que lo llaman hogar.
Al mismo tiempo, los que aquí vivimos nos sentimos prestigiosos ya que tenemos a nuestro alcance varios tipos de entretenimiento y de belleza que nos embriaga todo el año. En la primavera, Negriburgo explota con el renacimiento de árboles y flores que embellecen a este pequeño pueblo. En el verano el calor abunda, no obstante es soportable en comparación con otra ciudades del este del país, las cosechas comienzan a dar fruto exponiendo sabrosas frutas y verduras locales que forman parte del mercado de agricultores en el centro del pueblo. El otoño es mi estación favorita, ya que la diversidad de tonos en los árboles hace que las montañas y todo el paisaje natural parezca una pintura de óleo con tonos completamente irreales. Las mezclas de verde, amarillo, anaranjado, rojo y marrón además del aroma otoñal hacen que cualquier persona se enamore de este pueblo. Por otro lado, Negriburgo es conocida como una ciudad artística, ya que la universidad de Virginia Tech y la municipalidad han logrado formar eventos, ferias y/o galerías de artes para expandir el conocimiento e intensificar el intercambio cultural que aquí reside.
Negriburgo o Blacksburg siempre tendrá sus puertas abiertas. Nosotros, sus residentes, seguiremos orgullosos de llamar a este pequeño pueblo nuestro hogar ya que todo lo que a aquí pertenece o crece es fascinante y único. Siempre tendremos nuestros brazos abiertos para acoger a nuevos residentes y trataremos de alguna manera u otra seguir reforzando la gran reputación como uno de los mejores lugares para vivir en este país.