El departamento de Servicios Gastronómicos de Virginia Tech está experimentando una escasez de empleados este semestre según un artículo del Collegiate Times. Según este artículo, ha habido de un 10 a un 15% menos de contrataciones, ya sea de alumnos, ya sea de empleados locales (Vazquez). Esta falta de trabajadores ha afectado mucho a la experiencia gastronómica en los comedores en Virginia Tech y ha causado una inundación de quejas sobre el tiempo de espera y el empeoramiento de la calidad de la comida (Vazquez).
Esto está ocurriendo a pesar de un aumento de .50 dólar del salario de todos los empleados de Los Servicios Gastronómicos de Virginia Tech y un par de ferias de empleo que ya han tenido lugar. Sin embargo, los trabajadores de los comedores en el campus están intentando frenéticamente combatir las filas largas de alumnos hambrientos.
Este problema es bastante normal al principio del semestre del otoño, dado que los comedores requieren que los trabajadores trabajen más durante las semanas iniciales y que partes de algunos comedores permanezcan cerradas hasta que aquellos comedores contraten a más trabajadores. Sin embargo, esta reducción actual significa que los empleados tienen que trabajar mucho más duro y por más horas durante la semana hasta que lleguen bastantes empleados nuevos. Turner Place, uno de los comedores en el campus, se ha visto afectado significativamente por esta falta de empleados. Todavía tiene que cerrar temprano o no abrir algunas de sus partes porque no tiene un número suficiente de trabajadores para tener todas las secciones abiertas todo el día. También, las filas en la mayoría de los comedores son muy largas (en las secciones abiertas), lo que está enojando a muchos estudiantes. En D2, otro comedor en el campus, a los empleados les cuesta mucho trabajo combatir las filas larguísimas, especialmente sin trabajadores conocedores y también durante las horas puntas. Es más difícil servir a las masas de clientes con empleados no experimentados porque los experimentados tienen que enseñar a los nuevos, lo que puede extender el tiempo de servicio. Los empleados no conocedores no trabajarán tan rápido como los experimentados ya que tienen que parar mucho para pedir ayuda. Todos estos problemas toman demasiado tiempo.
Una solución que ofrece el artículo del Collegiate Times a los alumnos de Virginia Tech es que los estudiantes traten de comer en los otros comedores en el campus en el lado residencial (Vazquez). Si más estudiantes comieran en los otros comedores, como D2, Owen’s, Burger ’37, Au Bon Pain, o West End, en vez de comer en los comedores más ocupados durante el día (específicamente Turner Place), habría más equilibrio en el número de estudiantes comiendo en un comedor a la vez (Vazquez). Pero, ¿qué pasaría con la cena? Mientras que el resto de los comedores se llenarán, Turner no tendría bastantes empleados para permanecer abierto. Los comedores en el lado residencial del campus seguirían llenándose y no habría ninguna alternativa aparte de cerrar algunas partes del comedor y tener filas muy largas, lo que ya enoja mucho a los estudiantes de Virginia Tech según el artículo del Collegiate Times.
Por estas razones, es evidente que la situación de las contrataciones es muy problemática. Aunque tener una escasez de empleados es normal durante esta parte del semestre, esta falta es un poco más extrema y los comedores están luchando por servir a un número grande de estudiantes que come en los comedores del campus cada día. No hay mucho que los comedores y sus trabajadores puedan hacer hasta que más empleados sean contratados pero, con un poco de paciencia, el departamento de Servicios Gastronómicos podrá resolver la situación muy pronto.